A partir de 1995 varias instituciones culturales realizaron a la par de mi exposición de "Caricaturas y Calaveras", una muestra de altares tradicionales.
En esta ocasión (1999), mis caricaturas eran tridimencionales, hice cadáveres de papel maché, metidos en ataúdes, colocados en el altar del Museo de Arte (del cual era Director).